Juan 10:22-30 - Verdadera Seguridad

Ray Holmes  SAM1268  10/9/2022
  1. Se celebraba entonces la fiesta de la Dedicación en Jerusalén. Era invierno,
  2. y Jesús andaba en el templo por el pórtico de Salomón.
  3. Entonces le rodearon los judíos y le dijeron: —¿Hasta cuándo nos tendrás en suspenso? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente.
  4. Jesús les contestó: —Os lo he dicho, y no creéis. Las obras que yo hago en nombre de mi Padre, éstas dan testimonio de mí.
  5. Pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas.
  6. Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen.
  7. Yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, y nadie las arrebatará de mi mano.
  8. Mi Padre que me las ha dado, es mayor que todos; y nadie las puede arrebatar de las manos del Padre.
  9. Yo y el Padre una cosa somos.