Orad por nosotros, pues confiamos que tenemos buena conciencia y deseamos conducirnos bien en todo.
Con mayor insistencia imploro que lo hagáis, para que yo os sea restituido pronto.
Y el Dios de paz, que por la sangre del pacto eterno levantó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, el gran Pastor de las ovejas,
os haga aptos en todo lo bueno para hacer su voluntad, haciendo él en nosotros lo que es agradable delante de él por medio de Jesucristo, a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Os ruego, hermanos, que recibáis bien esta palabra de exhortación; porque os he escrito brevemente.
Sabed que nuestro hermano Timoteo ha sido puesto en libertad. Si él viene pronto, yo iré a veros con él.
Saludad a todos vuestros dirigentes y a todos los santos. Os saludan los de Italia.