Noé tenía 600 años cuando vino el diluvio de aguas sobre la tierra.
Noé entró en el arca, y con él sus hijos, su mujer y las mujeres de sus hijos, por causa de las aguas del diluvio.
De los animales limpios y de los animales no limpios, de las aves y de todo lo que se desplaza sobre la tierra,
de dos en dos entraron en el arca con Noé, macho y hembra, como Dios había mandado a Noé.
Y sucedió que a los siete días vinieron sobre la tierra las aguas del diluvio.
El día 17 del mes segundo del año 600 de la vida de Noé, en este día fueron rotas todas las fuentes del gran océano y fueron abiertas las ventanas de los cielos.
Y hubo lluvia sobre la tierra durante cuarenta días y cuarenta noches.
En este mismo día entraron en el arca Noé, sus hijos Sem, Cam y Jafet, la mujer de Noé y las tres mujeres de sus hijos con ellos.
Entraron ellos y todos los animales según su especie, todos los animales domésticos según su especie, todos los animales que se desplazan sobre la tierra según su especie, todas las aves según su especie, y todo pájaro, todo lo que tiene alas.
Y vinieron al arca, a Noé, de dos en dos, de todos los seres que respiran.
Vinieron macho y hembra de todo animal, como Dios le había mandado. Y Jehovah le cerró la puerta.
El diluvio duró cuarenta días sobre la tierra. Las aguas crecieron y levantaron el arca, y se elevó sobre la tierra.
Las aguas crecieron y se incrementaron tanto sobre la tierra que el arca flotaba sobre la superficie de las aguas.
Las aguas subieron tanto sobre la tierra que las montañas más altas debajo de todos los cielos fueron cubiertas.
Las montañas fueron cubiertas, y las aguas crecieron quince codos por encima.
Y murió todo ser que se desplaza sobre la tierra, tanto las aves como el ganado, las fieras, los animales que se desplazan sobre la tierra y todos los hombres.
Murió todo cuanto tenía aliento de vida en sus narices, todo lo que había en la tierra seca.
Así fue arrasado de la faz de la tierra todo ser viviente. Fueron arrasados de la tierra desde el hombre hasta el ganado, los reptiles y las aves del cielo. Sólo quedaron Noé y los que estaban con él en el arca.
Y las aguas prevalecieron sobre la tierra durante 150 días.
Dios se acordó de Noé y de todos los animales y todo el ganado que estaban con él en el arca, e hizo soplar un viento sobre la tierra, y las aguas disminuyeron.
Fueron cerradas las fuentes del océano y las ventanas de los cielos, y se detuvo la lluvia de los cielos.
Las aguas decrecían gradualmente sobre la tierra, y después de 150 días las aguas habían menguado.
El día 17 del mes séptimo se asentó el arca sobre los montes de Ararat,
y las aguas siguieron decreciendo hasta el mes décimo. El primer día del mes décimo se hicieron visibles las cumbres de las montañas.